lunes, 5 de diciembre de 2016

CABARET SAUVAGE

MATERIA MUERTA

Antonio Campillo Ruiz


   Materia cosida, taladrada, retorcida, múltiples veces usada, se muestra desnuda en una obra que siente dolor, que perpetúa la docilidad de los usos anárquicos que pueden representar multitud de aspectos que ensalzan belleza, fealdad, amor, rechazo, placer, dolor.


   El autor representa con la sencillez de los materiales utilizados la heterogeneidad y la conjunción de las materias que conforman una representación artística personal, sentida y amada. El papel donde se puede leer un contenido ya pasado, ya erróneo en su mínima historia, es capaz de conformar un mundo que representa su delicada estructura de celulosa retorcida, endurecida, maltratada por quienes lo han disfrutado y ahora, es la representación de su renacer entre su pobre información.


  El desecho común, recogido de entre los materiales muertos, deben cobrar vida bajo la mirada y el nuevo empleo en un lugar inesperado, posiblemente inapropiado pero que en él, representa su verdadera utilidad, su aplicación ante la percepción y la aceptación de quienes le contemplan y leen en él un atisbo de verdad y de constreñimiento, de retorcerse ante la potencia de quien los recoloca tras una vida de trabajo que ha sido fructífera.


   Observar lo inaceptable, lo patético, lo que conforma un mundo que se compone de materia diversa y de mezcla incesante entre las materias.  Observar lo bello, lo representativo, aquello que añade a la contemplación aspectos recién descubiertos y recién observados, la sorpresa. Una sorpresa que en toda la obra de Manolo Belzunce se muestra cruda, tan cruda como la realidad.

Es importante visionar el montaje a plena pantalla.

2 comentarios:

  1. A veces resulta inquietante el paralelismo entre artistas de los que no se tiene noticia que estuvieran en contacto, moviéndose como lo hicieron, en los mismos escenarios.
    Conocía el nombre y alguna obra de Belzunce, pero nada de su biografía. De ahí que al ojearla me hayan parecido curiosas sus huellas, a menudo superpuestas a las de Josep Mª Subirachs. Un vídeo revelador

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    1. ¡Muchas gracias, Ana María! Tu sabia apreciación es uno de los aspectos que casi, repito, casi pude descubrir al leer tus excelentes crónicas y artículos sobre Josep Mª Subirachs. Tu confirmación me hace feliz por aprender de tus textos mucho más de lo que creía. Un gran abrazo, mi querida amiga.

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